¿Quieres respuestas directo en tu correo electrónico?
Suscríbete para recibir devocionales diarios GRATIS y actualizaciones de Bayless.
Es muy fácil para nosotros pensar que Cristo es majestuoso, alguien muy poderoso que está en los cielos, impertérrito por lo que ocurre en nuestras vidas. Sin embargo, Hebreos 4:15 nos pinta un retrato completamente diferente.
No tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado. (RVR1995)
¿Alguna vez se ha puesto a pensar que Jesús se compadece de usted? Dios no es distante ni despreocupado, ni tampoco le ve a usted con un ojo clínico y calculado. Él realmente se conmueve y se compadece.
Quiero mostrarle un versículo que, en lo personal, es increíble. Es Isaías 63:9 y habla sobre Dios y su pueblo. Dice lo siguiente:
En toda angustia de ellos él fue angustiado, y el ángel de su faz los salvó; en su amor y en su clemencia los redimió, los trajo y los levantó todos los días de la antigüedad. (RVR1995)
Cuando usted sufre, Dios sufre. Dios no es insensible, inconmovible o indiferente.
Luego está Jeremías 31:20 donde Dios dice (hablando sobre Israel como una sola persona): “Lo he recordado constantemente. Por eso mis entrañas se conmovieron por él, y ciertamente tendré de él misericordia, dice Jehová” (RVR1995).
Por último, vea lo que dice Salmos 145:8–9:
Clemente y misericordioso es Jehová, lento para la ira y grande en misericordia. Bueno es Jehová para con todos, y sus misericordias sobre todas sus obras. (RVR1995)
Dios siente y se compadece. Se conmueve y se aflige mientras usted atraviesa las dificultades de la vida. Él comprende. Y añora darle misericordia.
¡Así es el corazón compasivo y misericordioso de Dios!
Escuche este devocional haciendo click aquí
No es inusual que el ascenso de Dios al principio parezca un descenso, o que uno se sienta como si fuese de reversa. Hay un par de buenos ejemplos de...
En Lucas 16:12, Jesús, hace una declaración muy interesante—unas palabras que nos dan una visión de la fidelidad que se espera de nosotros: Y, si con lo ajeno no han...
Uno de la multitud le dijo: Maestro, dile a mi hermano que divida la herencia conmigo. Pero El le dijo: ¡Hombre! ¿Quién me ha puesto por juez o árbitro sobre vosotros? Y les...
Suscríbete para recibir devocionales diarios GRATIS y actualizaciones de Bayless.
¡Gracias por suscribirte a nuestro devocional diario! Ahora revisa tu correo electrónico para confirmar tu suscripción.