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En Ezequiel 34:26, Dios está hablando las siguientes palabras:
Y daré bendición a ellos y a los alrededores de mi collado, y haré descender la lluvia en su tiempo: lluvias de bendición serán. (RVR1995)
En este pasaje, Dios ciertamente está hablando de la lluvia natural cuando se refiere a las lluvias que enviará. Estas son las lluvias que ha prometido al pueblo de Israel las cuales regarán la tierra haciendo que aumente, que sea fructífera y traiga abundante cosecha.
Sin embargo, más que eso, cuando Dios dice que traerá lluvias de bendición, se está refiriendo a traer bendiciones en las vidas de Su pueblo. La lluvia es símbolo de algo más que la simple lluvia que cae en la tierra. Simboliza las cosas buenas que Dios quiere traer a las vidas de aquellos que le sirven.
Dios quiere traer lluvias de bendiciones a su vida. No solamente una o dos bendiciones, sino lluvias de bendiciones. Una abundancia de bendiciones.
Quizás usted sienta que está en una temporada de sequía en vez de experimentar lluvias de bendiciones. Durante los próximos devocionales, le ayudaré a comprender:
Por hoy, quiero que empiece a ver el deseo de Dios de hacer llover bendiciones en su vida. Si usted está sintiendo un sequía espiritual, le pido a Dios para que use los próximos devocionales para ayudarle a romper esa sequía, y para que experimente las frescas lluvias de Sus bendiciones.
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