¿Quieres respuestas directo en tu correo electrónico?
Suscríbete para recibir devocionales diarios GRATIS y actualizaciones de Bayless.
En las páginas del Nuevo Testamento hay una poderosa promesa para aquellos que son dadores generosos. Ésta se encuentra en Filipenses 4:18–19:
Ya he recibido todo lo que necesito y aún más; tengo hasta de sobra ahora que he recibido de Epafrodito lo que me enviaron. Es una ofrenda fragante, un sacrificio que Dios acepta con agrado. Así que mi Dios les proveerá de todo lo que necesiten, conforme a las gloriosas riquezas que tiene en Cristo Jesús.
La iglesia de Filipos había hecho del sostenimiento económico del apóstol Pablo su prioridad. En estos versículos Pablo reconoce su generosidad y también declara un principio muy importante para que todo creyente comprenda—uno no puede superar a Dios en dar.
No hace mucho, recibí una carta de una señora que había dado sacrificadamente a la obra de Dios. Esto fue lo que escribió en su carta:
“Mi esposo y yo estábamos en una situación desesperada. Él es un veterano de la Guerra de Vietnam que fue dañado por el Agente Naranja. Debido a que le negaron la solicitud de sus beneficios y a que estuvo desempleado por tres años, perdimos casi todo lo que teníamos. Tuvimos que poner nuestra casa en venta, pero no se vendía. Durante este tiempo, di cada centavo que llegaba a mis manos y siempre oraba. Y un milagro tras otro comenzó a ocurrir. Primero, pudimos mudarnos a la casa que mi suegra dejó después de morir. Luego, firmamos los documentos para la venta de nuestra casa. Después, la solicitud de beneficios de mi esposo fue aprobada y concedida con efecto retroactivo de tres años. Después, mi esposo encontró un trabajo. Nuestros ingresos se han triplicado, y Dios continúa haciendo milagros en nuestras vidas”.
Amigo, sea un dador generoso hoy mismo. Porque jamás podrá superar a Dios en dar.
Escuche este devocional haciendo click aquí
Efesios 6:10–13 nos hace una sobria advertencia: Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor y en su fuerza poderosa. Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis...
Efesios 2:4–7 dice: Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor por nosotros, nos dio vida con Cristo, aun cuando estábamos muertos en pecados. ¡Por gracia ustedes...
Hay ocasiones en las tenemos que perdonar a alguien por algo que ha hecho. En ocasiones puede ser muy difícil—casi imposible. Pero el perdón no es una opción para usted...
Suscríbete para recibir devocionales diarios GRATIS y actualizaciones de Bayless.
¡Gracias por suscribirte a nuestro devocional diario! Ahora revisa tu correo electrónico para confirmar tu suscripción.