¿Quieres respuestas directo en tu correo electrónico?
Suscríbete para recibir devocionales diarios GRATIS y actualizaciones de Bayless.
Malaquías 3:8–9 nos da una advertencia seria:
¿Acaso roba el hombre a Dios? ¡Ustedes me están robando! Y todavía preguntan: ¿En qué te robamos? En los diezmos y en las ofrendas. Ustedes —la nación entera— están bajo gran maldición, pues es a mí a quien están robando.
Ahora bien, si piensa sobre esta declaración, se debe preguntar: ¿Cómo le puedo robar yo a Dios? ¿Qué significa eso?
Hay dos maneras de robarle a Dios cuando rehusamos diezmar:
La promesa en Proverbios es que nuestros graneros se llenarán hasta rebosar si honramos al Señor con nuestras primicias (Proverbios 3:9–10).
Dios puede bendecirnos. Él desea bendecirnos. No le robemos la oportunidad de hacerlo, ni el honor que Él se merece.
Escuche este devocional haciendo click aquí
En Mateo 6:22–24, Jesús nos habla del impacto que se crea cuando Dios tiene nuestro corazón por completo: El ojo es la lámpara del cuerpo. Por tanto, si tu visión...
Durante los últimos devocionales, hemos aprendido la importancia de la motivación de nuestro corazón para dar, orar, y ayunar. En Mateo 6:19–21, Jesús continúa tratando otras cuestiones del corazón: No...
Dios se preocupa profundamente sobre las motivaciones de nuestros corazones. En el devocional anterior, vimos que el corazón es de suma importancia a la hora de dar. En Mateo 6:6,...
Suscríbete para recibir devocionales diarios GRATIS y actualizaciones de Bayless.
¡Gracias por suscribirte a nuestro devocional diario! Ahora revisa tu correo electrónico para confirmar tu suscripción.