¿Quieres respuestas directo en tu correo electrónico?
Suscríbete para recibir devocionales diarios GRATIS y actualizaciones de Bayless.
Uno de la multitud le dijo: Maestro, dile a mi hermano que divida la herencia conmigo. Pero El le dijo: ¡Hombre! ¿Quién me ha puesto por juez o árbitro sobre vosotros? Y les dijo: Estad atentos y guardaos de toda forma de avaricia; porque aun cuando alguien tenga abundancia, su vida no consiste en sus bienes. (Lucas 12:13–15 LBLA)
La vida no se trata ni de la cosas ni de cuánto uno puede acumular. Su identidad y su valor como persona no deberían estar basados en la abundancia de sus posesiones.
Sin embargo, si su sentido de valía como persona está limitado a sus cosas, ¿qué sucede si las pierde?
A un pariente mío de hace algunas generaciones el gobierno le confiscó todas sus posesiones después de la Guerra Civil. Este hombre murió quebrantado y amargado. Ése es el fin de alguien cuya identidad y sentido de valor dependen de sus cosas.
Este hombre que vino a Jesús para dividir su herencia tenía el verdadero tesoro enfrente de él todo el tiempo, pero no podía verlo porque las “cosas” se lo impedían. ¡Su verdadero tesoro era su hermano!
Él estaba en desacuerdo con su hermano. Había fricción y tensión entre ellos sobre la herencia. Aparentemente, este hombre estaba dispuesto a destruir su relación con su hermano por causa de las cosas.
La vida no consiste en la abundancia de las cosas que poseemos, sino en las ricas relaciones interpersonales que tenemos.
En el próximo devocional compartiré con usted tres tipos de relaciones que hacen a una persona rica.
Escuche este devocional haciendo click aquí
En el segundo mandamiento que se encuentra en Éxodo 20:4–6, se nos da el segundo principio para una matrimonio fuerte: No te harás imagen ni ninguna semejanza de lo que...
El primer mandamiento de los Diez Mandamientos es simplemente éste y se encuentra en Éxodo 20:3: No tendrás dioses ajenos delante de mí. (RVR1995) ¿Qué está diciendo Dios en este mandamiento?...
Los buenos matrimonios simplemente no suceden por arte de magia. No es porque se casó con la persona correcta y tuvo suerte. Los buenos matrimonios están edificados en algo más...
Suscríbete para recibir devocionales diarios GRATIS y actualizaciones de Bayless.
¡Gracias por suscribirte a nuestro devocional diario! Ahora revisa tu correo electrónico para confirmar tu suscripción.