¿Quieres respuestas directo en tu correo electrónico?
Suscríbete para recibir devocionales diarios GRATIS y actualizaciones de Bayless.
En el devocional anterior comenzamos una serie de devocionales enfocados a saber cómo recobrar su filo espiritual. Mientras pensamos en cómo lograr esto, es importante que nos demos cuenta de aquellas cosas que indican que hemos llegado a apagarnos espiritualmente.
Creo que la característica número uno que encontrará en alguien que ha perdido su filo espiritual es que ya no reconoce la voz del Espíritu Santo. Las impresiones que el Espíritu Santo deja en su corazón, a través de cómo le dirige, ya no son claras.
En Mateo 13:14–15, Jesús habla sobre esto de una manera bastante clara:
“De manera que se cumple en ellos la profecía de Isaías, que dijo: “De oído oiréis, y no entenderéis; y viendo veréis, y no percibiréis, porque el corazón de este pueblo se ha entorpecido, y con los oídos oyen pesadamente, y han cerrado sus ojos; para que no vean con los ojos, ni oigan con los oídos, ni con el corazón entiendan, ni se conviertan y yo los sane”. (RVR1995)
De esta preocupación se hace eco Hebreos 5:11 donde el escritor, al hablar del sacerdocio de Cristo, dice:
Acerca de esto tenemos mucho que decir, pero es difícil de explicar, por cuanto os habéis hecho tardos para oír. (RVR1995)
¿Ha perdido su filo? ¿Ha perdido esa sensibilidad a la voz de Dios? ¿Escucha con oídos físicos, pero sin entender con el corazón? ¿Ve con ojos físicos, pero sin percibir lo que Dios está haciendo?
Jesús dijo que eso es lo que sucede cuando el corazón se apaga. Cuando alguien pierde su filo espiritual, el resultado es una insensibilidad a la voz de Dios.
Si eso le describe a usted hoy, pídale a Dios que abra sus ojos para ver y sus oídos para oír. Comience ahora a recobrar su filo espiritual.
Escuche este devocional haciendo click aquí
Efesios 1:11 es una versículo poderoso con una lección vital: En Cristo también fuimos hechos herederos, pues fuimos predestinados según el plan de aquel que hace todas las cosas conforme...
Hoy quiero dirigir nuestra atención a Santiago 1:2–4: Hermanos míos, considérense muy dichosos cuando tengan que enfrentarse con diversas pruebas, pues ya saben que la prueba de su fe produce...
En 1 Corintios 1:26–29 dice: Hermanos, consideren su propio llamamiento: No muchos de ustedes son sabios, según criterios meramente humanos; ni son muchos los poderosos ni muchos los de noble...
Suscríbete para recibir devocionales diarios GRATIS y actualizaciones de Bayless.
¡Gracias por suscribirte a nuestro devocional diario! Ahora revisa tu correo electrónico para confirmar tu suscripción.